Cómo frenar una ráfaga de pensamientos que nos preocupan y nos roban la paz

practicas de conocimiento que te llevan a descubrir tu ser interior, la meditación es un camino de autodescubrimiento, que te enseña, el camino de regreso al espritu, el alma, te sorprende con sus maneras creativas para enseñarte a conectar contigo

Lo primero es poder observar y ser consciente de que estás inmerso en un torbellino de pensamientos. Que estás usando toda tu energía  construyendo escenas, que te sacan de la presencia de lo que hay acá y ahora. Observarlos es una tarea que requiere paciencia y amor por ti mismo, a veces difícil, porque estos pensamientos yo los represento como si fueran una pequeña telita, similar a una segunda piel que si has usado por mucho tiempo ya ni incómoda, solo está ahí trabajando a nivel interno incluso afectando tu biología.

Para aprender a observar hay que aprender primero hacer un alto, en silencio, entregar el control a la respiración y aprender a observar. Prácticas como la meditación, pueden enseñarte suave y sutilmente estas capas de pieles que dicen ser tu realidad, que construyen tu identidad y tus respuestas. 

“Llevo meditando dos años, sin embargo aún experimento torbellinos de pensamientos inclementes. Estos pensamientos cuando son observados con una mente ecuánime se pueden volver unos agentes del alma, es decir las pistas que justamente necesitamos para pasar a un siguiente nivel, a una mejor versión de nosotros mismos mismo”

Los pensamientos son ráfagas de palabras, imágenes, recuerdos, conversaciones, construcciones de realidades, que interrumpen tu presente, llenando tu momento de sensaciones confusas, diversas, donde el corazón intenta alcanzar el ritmo para entender a qué debe dar e impregnar  amor.

Sin embargo el ego, continúa alimentando la ráfaga, protegiendo las heridas pasadas, no nos permite escuchar la ecuanimidad en nosotros, solo produce más palabras, tapa, tapa, y nuevamente tapa, responde sobre los cuestionamientos: con un “No me importa”, “así soy yo” y se arma un diálogo interno confuso y continúa toda la avalancha de palabras e ideas, que bloquean el flujo de lo que está acá y ahora. Lugar en el cual estás, un eterno presente.

A pesar de meditar, todas las mañanas la última semana ha sido un torbellino que sopla y sopla, y a penas estoy cogiendo piso de nuevo, una oleada viene y me levanta.  Me doy cuenta que eso pasa, gracias a mi práctica de meditación, respiro, pero vuelve y sopla, me enganchó y casi no puedo bajar.

No es que esté meditando mal, no, porque en la meditación no hay correctos ni incorrectos. Mi Alma está buscando enseñarme algo y para entender qué pasa, veo este momento como una oportunidad. Hoy decidí abrirme a la experiencia y le permití a mi alma que sea un agente de mis pensamientos, que dirija mi Ego, mi mente y mi corazón. Hasta que por fin la oportunidad se aclaró para hacerme preguntas valiosas que me permitan aprender de mi misma.

  • ¿Estos torbellinos que se están robando mi atención y no paran son una manera de huir de mi realidad? 

  • ¿A qué le estoy huyendo?

  • ¿Para qué elijo este pensamiento una y otra vez? 

  • ¿De qué me hablan estos pensamiento?

Estas preguntas que salen de una mente más ecuánime, pausada y en paz, dan paso al flujo sagrado de la intuición, estas respuestas te conectan directamente con la herida que necesita ser sanada, es por eso que la observación de los mismos se hace de manera amorosa y su respuesta sincera te llevará sin duda a encontrar un siguiente nivel. Uno para el que probablemente ya estés preparado.

El punto está en ser tan consciente de ti mismo, para usar estos momentos que son un  fuera de “control” para crecer y conocerte un poquito más.

Ahora bien, en mi caso, generalmente estas respuestas, me están pidiendo cambios, me están pidiendo salir de mi zona de confort, si comienzas paso a paso a quitar y quitar velos, con suavidad y dulzura hacia ti mismo, con claridad obtendrás lo que necesitas hacer. Quizá esa respuesta te genere miedo, el reconocimiento del mismo también es un paso esencial en el camino.

Al final eres tú quien puede decidir qué hacer con todo ese mar de conciencia, echar mano de tu corazón que te ama y libera y de tu ego sano, para sacar fuerza y actuar; o continuar huyendo con historias que te sacan de tu realidad. 

Cuando lo logras ver así, desde arriba, desidentificadx de ello puedes conectar con el Espíritu, rendirte a su guía, entregarle tu confianza plena y eterna, entendiendo que todo será perfecto como es, porque es eso que estamos viviendo para lo que estamos preparados. Es esa  la matrícula para el pensum de nuestra vida.

Con lo anterior te quiero exponer cómo todo este tejido de sanación se entrelaza, cómo el corazón guarda la llave que libera el alma: el amor. El amor tiene la capacidad de traspasar y trascender  todas y cada una de las dimensiones de las que estamos hechos: Cuerpo, (sensaciones); mente (Pensamientos, emociones, ego) Entendemos cómo el alma se vale de todas estas herramientas para llevarte de regreso al espíritu al hogar de la creatividad, de la fluidez, de la sencillez y de la grandeza, de la inmensidad y de la belleza de la expansión, la receptividad y de la abundancia, del aquí y del ahora, de la impermanencia e infinitud de la vida.

Si has llegado hasta acá, te lo agradezco de corazón, me encantaría que me dejaras un comentario sobre este artículo, ¿fue claro para ti?, ¿te identificas? ¿te gustaría aprender a meditar?

Con cariño Valen

Valentina Ramirez

Hola, soy Valentina, creadora de myvalentia.com. Una plataforma web que ofrece talleres creativos y herramientas de conciencia que traerán dicha y autoconocimiento a tu vida. Te acompaño con estas herramientas de conciencia a crear una practica espiritual creativa que revelen el poder y valor que hay en tu interior.

Llevo 6 años estudiando, reiki, meditación, arte, descodificación biológica de la enfermedades y aplicando toda estas enseñanzas en mi, puedo decirte que mi vida y energía han cambiado por completo y que acá estoy para acompañarte a emprender este viaje de conocimiento interior.

https://www.myvalentia.com
Anterior
Anterior

Cómo recuperé la presencia a través de 3 sesiones de REIKI

Siguiente
Siguiente

5 maneras de sostener tú entusiasmo, esperanza y fé.